Entre crisis místicas, arrebatos regulares y controversias, Kanye West confirma su estatus de eterno incomprendido de la industria del rap.
No maneja bien el Twitter
Los arrebatos de Kanye West son ya de culto y no sorprenden a casi nadie: tras un prolongado enfrentamiento con Drake, a quien atacó públicamente, el rapero de Atlanta causó una monumental polémica por sus declaraciones sobre la esclavitud, al decir que los esclavos afroamericanos fueron esclavos por elección. Derrapajes 2.0 temidos por su esposa, Kim Kardashian, que no duda en mostrar las entretelas, llenas de emociones, de su vida privada con el rapero en su reality show de TV Keeping Up with the Kardashians.
Su crisis de fe
Escenificaciones crísticas y sermones apasionados: el intérprete de The College dropout al parecer atraviesa una crisis religiosa desde hace unos meses. Todos los domingos, en misas al aire libre donde es acompañado por un coro de 80 personas, el rapero interpreta sus clásicos frente a una multitud de fieles creyentes comprometidos con su causa, en la tradición de la Iglesia Bautista Americana. ¿Un regreso a las fuentes para alguien que siempre ha salpicado sus temas con referencias a Jesús? De todos modos, su místico giro no parece haberle hecho perder su gran sentido de los negocios al avispado hombre de negocios que es Kanye West, ya que vende merchandising con toque religioso en cada uno de sus Sunday services. A precios que oscilan entre los 50 y los 225 dólares, se pueden comprar sudaderas donde se lee « Holy Spirit », camisetas «Trust God» y sus calcetines «Jesus Walk», que van camino de convertirse en artículos de colección.
Su incómodo apoyo a Trump
Hace apenas un año, Yeezus provocó la ira de los oyentes asombrados: en un vídeo surrealista difundido en masa por la prensa internacional y en las redes sociales, se pudo presenciar el encuentro entre el rapero de los 21 Premios Grammy y el presidente de los Estados Unidos. Con la gorra roja «Make America great again» típica de los fans de Trump, calzada sobre su cabeza, dio un discurso incoherente y cuando menos embarazoso. Aunque había declarado que ya no deseaba hablar públicamente de sus opiniones políticas, Kanye West al parecer volvió a las andadas: mientras estaba en Salt Lake City para la celebración de su Sunday Service, el hombre que parece haberse convertido en un gurú moderno reafirmó su apoyo inquebrantable al presidente Trump.
Su álbum se hace esperar
Hace unas semanas, Kim Kardashian fue autora de una de las publicaciones más virales en las redes, como es habitual en ella, al revelar en Instagram la lista completa de canciones de Jesus is king, el tan esperado próximo álbum de Ye. Originalmente programado para el 27 de septiembre, su lanzamiento parece estar en espera, para disgusto de sus (¿últimos?) fans.
¿Su talento para el diseño lo salvará?
Elogiado regularmente por sus inspiradas creaciones, Kanye West pone a todos de acuerdo con su marca Yeezy, que saca los pares imprescindibles, año tras año. Incluso hasta el punto de crear expectativa con las novedades más improbables, como sus Yeezy Foam Runner, dadas a conocer recientemente y que no dejan a nadie indiferente. Aunque este último modelo se parece tanto a unos Crocs que podrían confundirse, ya ha sido adoptado por Ariana Grande que posa orgullosa luciéndolo, en su cuenta de Instagram. ¡Así se hace, Kanye!